Resumen de la Sesión anterior de D&D. Lords of Darkness

"Me estan siguiendo" piensa para si mismo el Brujo Guile,
"Piensan que no me he dado cuenta pero lo sé, puedo verlos. El pacto que hice hace siglos con Asmosdeus y sus diablos esta dando frutos, y en una especie de burla me ha mostrado a aquellos que "Ella" ha enviado para detenerme!" continua pensando el Brujo Shadar-Kai mientras abre un misterioso muro que guardaba un pasaje secreto.

El Brujo de la bufanda plateada, Guile, de la raza de los Shadar-Kai ha sido atormentado con visiones ocasionales desde que forjó su pacto infernal con el Dios Asmosdeus, visiones que en ocasiones le muestran las cosas que eran, las cosas que son, y las cosas que serán, pero estas últimas, solo en forma catastrófica. En esta ocasión le muestran las cosas que son.

Guile ha vislumbrado como en un bote Teleri, el antiguo general que ha visto cientos de olmos desde semillas hasta volverse arboles huecos y sin vida, y ha combatido desde hace siglos a los señores oscuros y ha sido testigo de la caida de varios de ellos, el General Löwen, de los Eldars Noldors. Sin embargo no ha sido convocado solo, la Raven Queen ha invocado a su arma más mortifera y la ha puesto en carne mortal para detenerlo, a la entidad que nacio en el mar astral cuya esencia es aun más antigua que el planeta mismo, Kyarael, y la ha puesto lado a lado con el general elfico. Pero la señora de los muertos no detendra a Guile solo enviando a dos guerreros.

No. La señora parece que ha decidido divertirse o quiza esta nuevamente jugando con el destino y de los continentes oceanicos acerco a uno de los guerreros/bárbaros corrompidos por la esencia de la señora oscura Jenova para seguirlo, el Soldier, como se hacen llamar, mercenario por su forma de actuar, Cloud, que cree que su deseo de llegar a este continente es producto de su libre albeldrio "Hahahaha, libre albeldrio" Piensa nuevamente para si mismo Guile mientras deja escapar una sonrisa "Mientras la Diosa del Destino exista, no es posible el libre albeldrio, Todos somos títeres y ella jala los hilos".

Junto con el mercenario acude un hombre cuya curiosidad por lo nuevo y lo secreto lo harian parecer un gran fanático del Dios de los conocimientos ocultos, Vecna, sin embargo es lo suficientemente arrogante para creer solo en lo que sus ojos pueden ver, y su manos pueden reproducir, el Artificier, Desty Nova. Cuya satisfacción no se vio satisfecha hasta que destruyo una isla entera solo para "aprender".

"La Diosa del destino tiene una forma muy interesante de escoger a sus "heroes"" Piensa Guile, mientras con un movimiento de su mano enciende pequeños cristales en las paredes del sitio donde se encuentra, revelando un pasillo antiguo rodeado de cientos de cristales de colores violetas.

Asmosdeus le puso en la visión a Guile, como estos 4 heroes habian llegado a Arumi, el pequeño pueblo portuario donde se detuvo, antes de entrar al mausoleo del Rey del Invierno, donde encontro el "Tomo de la Reina Zeal", que siglos atras, la princesa Zha´hala habia ocultado. A cambio del poder, Guile con gusto sacrificaria al pequeño pueblo, ya habia sacrificado hasta su alma con tal de obtener lo que buscaba.

En su visión, observó como el asesino de la Raven Queen, el Comandante Elfo, el soldado corrompido, y el científico sin empatía eran llevados al mausoleo por el joven que en su momento le sirvió de guía y que Guile utilizó para traer de vuelta al sirviente del señor oscuro Orcus, El Rey del Invierno Grönd.

"Esta bien" piensa, "que se entretengan con el Rey del Invierno y el señor oscuro; así tendre más tiempo para recuperar lo perdido, y a tí Raven Queen, pronto te hare sentir el temor que durante siglos has provocado en los hombre, el temor a la muerte!" Grita el brujo mientras continua explorando las ruinas donde se encuentra.

Los cuatro de la visión de Guile continuan adentrandose en el mausoleo, enfrentandose a los esbirros del Rey del Invierno, sin saber que sus acciones son observadas por ojos antiguos y llenos de rencor, y no solo por los ojos del brujo de la bufanda plateada.